Día 1: De Bérgamo a Verona

Llegamos al aeropuerto de Vitoria - Gasteiz a media tarde, ya que el vuelo salía a las 17:20 y llegaríamos a Bérgamo a las 19:15.

Bérgamo

Una vez en Bérgamo fuimos directos al stand de GoldCar, compañía de alquiler de vehículos donde hicimos nuestra reserva de un vehículo básico (previo pago online).
Para sopresa nuestra, una vez en el mostrador, la persona que nos atiende nos dice que la tarjeta de crédito con la que se hizo la reserva online no era válida por no tener el nombre y los dígitos bancarios en relieve, si tal cual, nos quedábamos sin coche y teníamos que llegar a Verona a la noche porque teníamos una reserva realizada.
Como GoldCar se negaba a hacer efectiva la reserva, tuvimos que poner una reclamación vía mail, en realidad fueron decenas de llamadas a GoldCar para recuperar el depósito que habían cargado previamente haciendo la reserva online. Queremos aclarar que en su web no pone ninguna restricción de tarjetas de crédito.
Con un enfado tremendo, nos fuimos a otra compañia en la que sí que nos dejarían hacer la reserva, Maggiore. Era algo más cara pero la verdad que no tuvimos problemas de ningún tipo con ellos. En poco más de 20 minutos teníamos el coche en la puerta. Un Ford Fiesta con el que ni más ni menos que iríamos a las Dolomitas con una capa bastante interesante de nieve.

ALQUILER MAGGIORE
Precio: 280€.

Salimos de Bérgamo y fuimos por la autopista hasta Verona. El trayecto eran unos 120 Km y nos costó alrededor de 18€ en peajes.
Después de la discusión que habíamos tenido en el aeropuerto no teníamos más que ganas de descansar y pensar en que mañana sería otro día.
¿Descansar? Ni mucho menos... el hotel que habíamos reservado, no lo recomendamos, las camas eran realmente viejas, incómodas, sonaban a poco que nos moviéramos, era el cierre perfecto para este día...
Dormimos como pudimos que el día siguiente madrugaríamos para ver la ciudad, por lo que aquí acaba por fin, nuestro primer día.