Día 6: Burano
Venecia
Habíamos comprado con anticipo, a través de la web de http://www.italiatren.com/, los billetes de tren para ir de Venecia hasta Florencia (Santa Maria Novella) por un precio de unos 32€ por persona. El tren salía a las 16:35 y llegaría a Florencia a las 18:40.
Como queríamos ir a Burano antes de coger el tren, tratamos de coger uno de los primeros Vaporettos que salían hacia la isla. La línea de Vaporetto que hace el trayecto Venecia-Murano-Burano-Torcello es la línea LN y se coge en Fondamente Nove. El trayecto dura 45 minutos.
Burano
Burano es una pequeñita isla que se caracteriza porque todas sus casas están pintadas de colores, según se dice los vecinos pintaban sus casas de colores llamativos para que cuando volvieran de la mar pudiera ser fácilmente reconocida incluso con niebla.
Nada más bajar del Vaporetto fuimos directos a la zona céntrica de la isla. Es como estar en una ciudad de dibujos animados, llama mucho la atención el contraste de colores de cada una de las casas.


Os recomendamos tener mucha paciencia durante la visita a la isla, hay muchísimo turista, sobre todo chinos con los que tendrás que pelearte para que no salga ninguno de ellos posando frente a las puertas de las casas. Llega a ser a veces desesperante!
Lo mejor de la ciudad es perderse entre las calles y disfrutar de la amabilidad de los vecinos que incluso te recomiendan los mejores puntos para sacar fotos.

Como el día anterior llovió un montón muchos dejaban el paragüas a secar, además llamaba mucho la atención cómo colgaban la ropa en plena calle:

Hay una casa que destaca por encima de las demás debido a su colorido y esa es la conocida "Casa Bepi". Bepi fue un vecino de la isla que pintaba su casa cada vez de una manera diferente para regalarle a los turistas una instantánea distinta. Tras su muerte, se decidió restaurar la fachada y la dejaron con unos colores y formas muy llamativos, siendo un dibujo original suyo. La casa se encuentra detrás de Via Gallupi.

Otro de los puntos llamativos de la isla es que sólo hay una iglesia que tiene un Campanile, el cual está inclinado y se ve desde cualquier punto:

Después de sacar un montón de fotos de las diferentes puertas, ventanas y calles de la ciudad, fuimos a comer a un restaurante de la calle principal.

A pesar de estar disfrutando la visita, llegaba la hora de volver a Venecia. Fuimos al Vaporetto y volvimos rumbo al hotel, cogimos las maletas y directos a la estación de tren. Otra vez la tortura del primer día: cargar con las maletas con el sol machacandonos las espaldas y el continuo subir y bajar puentes atravesando gente. Cuando por fin llegamos a la estación de tren estábamos como para ir directos a la ducha! Comimos un helado mientras esperábamos la señal que indicaba el andén al que debíamos ir para coger nuestro tren.
El transporte público es el medio de transporte que más recomendamos, es muy cómodo, rápido y no demasiado caro. Nos esperaban 2 horas hasta llegar a Florencia que aprovechamos para descansar un poquito.
Florencia
Alquilamos un apartamento a través de la plataforma Airbnb, estaba cerca del Ponte Vecchio y a los pies de la Piazzale Michelangelo. Además la zona donde estaba ubicado el apartamento era bastante juvenil y tenía muchos bares y restaurantes donde cenar.
Durante el viaje habíamos repasado los apuntes sobre qué autobús debíamos coger para ir desde S.M. Novella hasta el apartamento. Y nada más pisar Florencia, nos dirigimos hacia la parada que está justo en frente de la estación de tren alucinando con la belleza de la iglesia que se encuentra en la mitad de la plaza.
Bajamos del autobús que nos dejó a escasos metros del apartamento y continuamos la agonía de arrastras las maletas por una acera no apta para las ruedas de nuetros trolleys. El apartamento era muy curioso, ya habíamos visto que el techo estaba decorado como si fuera un lienzo, pero la verdad que no le faltaba de nada, estaba muy bien equipado.
Tras una ducha rápida, bajamos a ver el Ponte Vecchio ya que la noche estaba cayendo y no íbamos a tener mucho tiempo. Fuimos directamente al Ponte Alle Grazie para tener la perspectiva de frente del Ponte Vecchio:

Compramos unas porciones de pizza y como estábamos agotados de tanto ajetreo, nos fuimos a descansar, mañana nos tocaría madrugar para poder visitar la ciudad.